Trabajar al aire libre en días de calor intenso puede afectar la productividad, la salud y la seguridad de los trabajadores. La exposición prolongada a altas temperaturas puede desencadenar una serie de lesiones y enfermedades laborales que van desde la deshidratación y el agotamiento hasta afecciones más graves como el cáncer de piel. A continuación, exploraremos estos riesgos y ofreceremos consejos para mitigarlos.
Impacto del calor en la salud laboral
El trabajo en condiciones de calor extremo puede reducir la capacidad de concentración, aumentar el riesgo de accidentes laborales y, en casos graves, provocar enfermedades como el cáncer de piel no melanoma. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la radiación ultravioleta solar es una de las principales causas de cáncer de piel ocupacional. En 2019, se registraron casi 19,000 muertes relacionadas con el trabajo al aire libre bajo el sol.
Algunas actividades, como la agricultura, la construcción y el turismo, son especialmente vulnerables a los efectos del calor. Estos trabajos requieren esfuerzo físico significativo y se realizan en ambientes donde la exposición al sol es constante. Los trabajadores que operan en ambientes cerrados, como fábricas y talleres, también enfrentan riesgos si las temperaturas internas no se regulan adecuadamente.
Medidas preventivas
La prevención puede reducir los riesgos asociados al trabajo en altas temperaturas. Los trabajadores deben tener acceso a períodos de descanso e hidratación, así como a protección solar, como sombreros de ala ancha y ropa de manga larga. En algunos lugares, el protector solar se considera parte del equipo de protección personal, pero en otros, esta práctica no está generalizada.
Aunque existen normas para abordar las condiciones térmicas en los lugares de trabajo, estas regulaciones a menudo no cubren adecuadamente las necesidades de los trabajadores al aire libre. La OIT insta a los gobiernos a mejorar las políticas y normativas para proteger a los trabajadores de la exposición al calor y la radiación solar.
Con el cambio climático aumentando las temperaturas globales, es esencial que tanto empleadores como gobiernos implementen medidas efectivas para proteger a los trabajadores del calor extremo. La salud y seguridad de millones de personas dependen de ello, y actuar ahora puede prevenir enfermedades y salvar vidas. Al abordar estos riesgos de manera proactiva, podemos garantizar un entorno de trabajo seguro y saludable para todos.
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